Uno de los hallazgos más significativos del estudio es que aumenta el apoyo de las izquierdas y las derechas a la idea de que “cuando hay mucha injusticia social, se justifican las manifestaciones con rayados, barricadas y bloqueos de calles”. El respaldo a esta idea crece 7 puntos en la izquierda (de 51% a 58%) y 11 puntos en la derecha (de 21% a 32%).

Este resultado nos lleva a pensar que está aumentando la insatisfacción con las respuestas de las instituciones a situaciones valoradas como injustas, que pueden asociarse a aspectos del orden social, económico o judicial y que ello alimenta el impulso a reaccionar. Es un aspecto que vale la pena vigilar a la luz de la crisis de confianza y corrupción que afecta a distintos poderes del Estado.

Es posible que el respaldo a las manifestaciones a favor de la justicia hable de una polarización que se construye sobre un eje distinto del político (izquierda-derecha). Se puede tratar del eje instituciones – ciudadanía.